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miércoles, 30 de abril de 2014

¡Cuidado con los grupos de whatsapp!

LOS GRUPOS DE PADRES Y MADRES DE CLASE



Aspectos positivos

Normalmente el grupo lo forman padres y madres de una misma clase. Inicialmente es una opción muy práctica:
o Se intercambia y se comenta información referente a la clase y a los niños: sobre los deberes, estudios…
o Se pasan noticias que pueden ser importantes para todos: charlas, reuniones, noticias del colegio…
o Se utilizan como una forma de organización y de ponerse de acuerdo: los cumpleaños, los disfraces, trabajos en grupo…

Pero…

Sin embargo, en muchos casos los grupos de padres y madres de Whatsapp tienen “un pero“, pueden “echarse a perder” y el uso ya no es tan positivo como al principio:
o Se hacen críticas destructivas hacia los profesores: que si manda muchos deberes, que si mandan pocos, que si grita mucho, que si es muy blando, que si esto, que si lo otro…
o En otros casos las críticas se dirigen hacia el resto de padres, los que no están en el grupo…
o A veces en los grupos sube el nivel y de las críticas al profesorado y al centro educativo, se pasa al insulto , a la mentira o a la calumnia…
o Se cuestiona la labor del profesor o del centro: que si el director, que si el jefe de estudios, que si el colegio…

CONSECUENCIAS

Cuando los grupos de padres y madres de Whatsapp se “echan a perder”, cosa que sucede con más frecuencia de lo que pensamos, las consecuencias no son buenas:
o En primer lugar se enfoca todo hacia lo negativo y eso no es sano. Se termina viendo solo el agujero… y nos olvidamos de la rosquilla.
o Se crean malos entendidos: “me han dicho…“; “dicen por ahí…“
o Cuando los “rumores negativos” afectan a nuestros hijos se comienza a generar resentimiento hacia el profesorado y el centro: “a mi hijo no lo atienden“; “a mi hijo le gritan“, “a tu hijo no le pasan una…”
o Se comienza a agrandar una imagen negativa del centro y de sus educadores, en especial, los profesores de sus hijos, que no se suele corresponder con la realidad.

Lo peor de todo es que, si parte de lo que se comenta en los grupos de Whatsapp es cierto, el chismorreo y el desahogo en el chat, no solo no mejora la situación… si no que la empeora.

ALGUNAS RECOMENDACIONES

Al final, en el caso de un colegio, lo que está en juego es la educación de sus hijos. Y en la educación de los hijos, o los profesores son sus colaboradores o de lo contrario, no será posible una verdadera Educación. Por eso, algunas recomendaciones que les ofrezco sobre este debate son las siguientes:

1. Uso adecuado de whatsapp

Utilícenlo adecuadamente. Eso quiere decir, úsenlo para intercambiar información, organizarse… estar informado.

2. Cortar los usos inadecuados

Si usted forma parte de un grupo de whatsapp y comienzan a utilizarse inadecuadamente, es decir, criticar, poner en cuestión, murmurar… intente cortarlo diciendo que ese uso no es adecuado, que eso no beneficia a sus hijos o de la manera que crea más oportuna.

3. Abandonar el grupo

Si sus intentos de cortar el mal uso no es eficaz, mi recomendación es que abandone el grupo y deje de estar en él. Si no lo hace y “dejar hacer“, yo considero que es cómplice por omisión.

4. Hablar con los profesores

Cualquier queja que tenga respecto a la educación de sus hijos no la trate de solucionar ni en whatsapp ni en la puerta del colegio: hable directamente con ellos.

En primer lugar, contraste la información con ellos y si hay algún problema, trate de que se solucione: si manda muchos deberes, si manda pocos, si grita, si no grita, si hace, si no hace…

Los profesores, como profesionales, les darán sus argumentos y créanme, que si están equivocados, la mayoría suele rectificar y cambiar: nadie quiere tener problemas con las familias.

Si tuviera la mala suerte de que los profesores no le atienden o no tienen en cuenta su descontento, pase al nivel superior: el equipo directivo. Y si este también le da la espalda acude a la Administración educativa.

Así que mi recomendación es que cuando participe en los grupos de whatsapp del colegio de sus hijos piense si su empleo beneficia su educación.


www.jesusjarque.com

martes, 22 de abril de 2014

Los niños reciben 400 órdenes al día


"Ponte la chaqueta" "No juegues con la comida" "Ten cuidado, te vas a manchar" "No hagas eso" "Mira, hazlo así como yo" "No grites" "No llores" "No pegues a tu hermano"... Imaginaos así hasta 400 veces al día. ¿Cómo os sentiríais? Pues así es un día normal de un niño de 2 años, según esta investigación.


Al verlo así, escrito todo de seguido, nos resulta exagerado; sin embargo, cuando escuchamos a un padre o madre con su hijo nos resulta algo normal. Es más, pensamos que forma parte de la educación: cuando los niños hacen algo mal hay que enseñarles, además tienen que saber qué está bien y qué está mal.

Pero, si nos paramos a pensarlo esta forma de hablar, llena de órdenes e imposiciones solo la tenemos con los más peques. No penséis que solo lo hacemos con los niños que "se portan mal", lo hacemos con todos. Es más, esta forma de relacionarnos con los peques aparece con frecuencia hasta en el juego, la actividad donde deberían tener una mayor libertad: "No le des de comer así al bebé" "Le tienes que cantar una nana para que se duerma".

¿Qué pasaría si nos hablasen así a los adultos? Muchos pensaréis, mis padres lo siguen haciendo a pesar de mi edad: "Uy, métete la camisa por dentro". Otros os estaréis acordando de vuestro jefe o superior: "Quiero el informe para esta tarde. No me valen excusas". ¿Y cómo os hace sentir? Pues ahora imaginaos así las 24 horas del día, todos los días de la semana. Acabaríamos frustrados de no poder expresarnos libremente y poder tomar decisiones por nosotros mismos.

Ahora si sois padres o educadores, os invito a pensar cuántas normas le damos al niño al cabo de una hora. Si no lo tenéis claro o pensáis que son pocas, coged una hora en la que soláis estar con el peque y haced un recuento del número de veces que le dais una órden, o le decís "No". Seguro que os sorprenderá la cantidad de veces que lo hacéis, porque suele ser algo de lo que no nos damos cuenta, lo hacemos sin pensar.

Tomar conciencia de ello y pensar en como nos sentimos nosotros cuando nos lo hacen, nos ayudará a educar en positivo teniendo más en cuenta las emociones de los peques.

Máquinas simples: La palanca. Tema 12

 

lunes, 21 de abril de 2014

BE HAPPY: UN PEQUEÑO LIBRO QUE TE AYUDA A SER FELIZ


¡Mirar este precioso vídeo, es genial!

 

Los 7 pecados capitales de los educadores


1.- Corregir en público…un educador debe valorar más a la
persona que se equivoca que a su error.

2.- Manifestar autoridad con agresividad. Cuando damos un espectáculo agresivo delante de los niños debemos pedir disculpas, por la manifestación de intolerancia que han presentado. El diálogo es una herramienta educacional insustituible.

3.- Ser excesivamente crítico. No tenemos que hacer comparaciones. Cada joven es un ser único.

4.- Castigar cuando se está enfadado y poner límites sin dar explicaciones. El castigo físico debe evitarse. Jamás castigues con rabia. No te dejes esclavizar por la ira. El mejor modo de ayudarles es hacerles reflexionar (que se pongan en el lugar del otro)

5.- Ser impaciente y desistir de educar. La paciencia y la educación del afecto deben ser las metas a conseguir por el educador.

6.- No cumplir con la palabra dada. La confianza es un edificio difícil de construir, fácil de demoler y muy difícil de reconstruir.

7.- Destruir la esperanza y los sueños. No importa la magnitud de nuestros obstáculos, sino el tamaño de la motivación que tengamos para superarlos.

Fuente: PADRES BRILLANTES, MAESTROS FASCINANTES —

Elementos de los polígonos

Test cuerpos geométricos






Clasificación de cuerpos geométricos





Clasificación de polígonos

Partes de los cuerpos geométricos